Ya ven ustedes, tras ocho millones de euros para reformar el Paseo de Óvalo, vuelve a tener un carril por dirección y zona para aparcar.
En fín, que los vecinos del Centro Histórico aún tenemos la capacidad de asombrarnos, aún viendo todo lo que se es capaz de llegar a justificar tanto desde la concejalía de tráfico como de transporte, pues no se están respetando las zonas peatonales y se les está dando más espacios a los vehículos.
Ya lo dice el refrán, envejecer es inevitable, madurar es opcional.
Ya lo dice el refrán, envejecer es inevitable, madurar es opcional.
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