jueves, 20 de mayo de 2010


No pretendía tratar este tema, pues no puedo ser objetiva en un tema que lo viví en primera persona. Aunque yo creo, que se tenga la edad que se tenga, excepto que se sea muy pequeña/o y que el padre biológico ya nunca más (por cualquier razón) no tenga relación alguna con sus hij@s, afecta la separación de los padres.
Esa palabra, padres es la que me hace escribir estas líneas, pues ya me canse de escuchar a la Diputada del PAR, María Herrero, hablar del derecho tanto de un padre como de otro a la crianza de los hijos cuando hay divorcio.
En fin que la frase no tiene desperdicio, querrá decir más bien padre y madre. Entiendo también que no solo en caso de divorcio, sino de separación de la pareja y sea cual sea el sexo de la pareja, es decir el mismo o diferente a la progenitora.
¡¡Caramba!! escribiendo, escribiendo veo que el tema tiene aún más enjundia, porque escuchando a esta política no veo que habla del “sentir” de los hijos/as de la pareja. Una vez más me da la impresión de que se hacen las cosas para los menores sin contar con su opinión.
Quizás es que he conocido a más hijos/as con experiencias “malas” que “buenas”, pero con esta ley nos hubiera obligado a tener relación con una familia paterna, que a veces no es deseable/deseada.
Quizás sea problema mío (por lo de la subjetividad), pero si algo te enseñan estas experiencias, es que cuando por fin eres dueñ@ de tu vida, eliges con quien mantener relación familiar pese a quien le pese. Y desde luego con quien te sientas a la mesa y a quien consideras amigo/a.

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